Érase una vez la mañana en la que unos agentes inmobiliarios se despertaron con la determinación de convertirse en los mejores profesionales del sector. Otra historia que terminaba con las frustraciones de haber cometido errores, fallado en la consecución de objetivos o, simplemente, no haber alcanzado las cuotas tan elevadas que se habían colocado en un momento de optimismo exacerbado. Menos mal que en su cuento apareció una vez un sabio que decidió aconsejarles en su caminar. Les mostró los secretos del mundo y entre susurros les confió la respuesta que tanto había guardado. Dos palabras mágicas que cambiarían su trayectoria profesional desde ese mismo instante: Método Kaizen. Sí. Has escuchado bien.
¿Qué demonios es el método Kaizen?
El método Kaizen tiene un punto de partida. No puedes buscar la perfección. Se trata de un ser mitológico con las mismas características que la esfinge egipcia. No puedes encontrar lo que no existe y tu misión solo será un tumultuoso camino que tendrá como compañera a la frustración.
Aunque pudieras pedirle a un Yinn el deseo de alcanzarla tampoco te lo recomendaríamos. ¿Para qué querrías llegar hasta allí? Lograrla solo dejaría futuro vacío, sin nada más que pugnar, sin nada más por lo que pelear. En Globaliza rechazamos de forma autoritaria la idea de la perfección. Abogamos por la excelencia del que está preparado para continuar su camino cada día, que cuando se cae se levanta y que entiende que lo gris es necesario para comprender la importancia del azul del cielo. Esos son los agentes inmobiliarios que se comen el mundo.
Por ello apostamos por el método Kaizen. Creemos que el secreto para convertirse en un gran profesional radica en dos patas. Indiferentemente del sector, ambas ideas se proclaman como bases de un proceso de superación personal y profesional. Nuestros agentes inmobiliarios se embeben con estos pensamientos y tratarán de aplicarlos cada jornada.
Pero, ¿cómo aplico todo lo relacionado con el método Kaizen en mis pautas como agente inmobiliario?
Lo primero que te debemos es colocarte en el contexto adecuado. No podemos pedirte que comprendas toda esta palabrería si no somos capaces de hacerte viajar a la realidad de donde proviene esta sabiduría.
Kaizen fue un estudioso japonés del mundo de la organización y el trabajo profesional. Desarrolló este método basándose en su propia experiencia y tras demostrar su eficiencia fue instaurado por muchas compañías. Entidades como Nintendo o Toyota, centenarias, basan su cultura empresarial en este método.
El método Kaizen está basado en dos ideas:
- Mejora continua.
- Elevar los estándares de calidad.
Mejora continua: la primera pata del método Kaizen
Parece de perogrullo, pero se trata de un ámbito que tenemos que mantener al alza en cada jornada. Solo siendo conscientes de que buscamos esta mejora continua podremos conseguir los objetivos propuestos.
El método Kaizen propugna por un aprendizaje consciente y dirigido. Que seamos capaces de determinar qué objetivos tenemos en el mapa y seguir las migas de pan que nosotros mismos nos colocamos para llegar hasta la barra de pan. Eso sí, sin descartar nunca la idea de que otros nos acunen en el camino.
Elevar los estándares de calidad
Al igual que en el apartado anterior era posible que tomáramos de la mano la ayuda de un compañero, en esta ocasión la soledad es un elemento fundamental y esencial en la tarea.
Cuando el método Kaizen esgrime la idea de elevar los estándares de calidad se refiere a que solo somos nosotros los que tenemos la capacidad de autoexigirnos cada día un poco más. Afirma que el proceso para lograr la mejora continua comienza en este punto.
Los elementos clave en la aplicación del método Kaizen
Cuando alguien nos lanza a la cara una nueva forma de encarar nuestra vida profesional siempre nos gusta que termine con una selección de puntos básicos a los que poder aferrarse para comprender toda la información. La telaraña es muy amplia y ni siquiera un delfín sabría por dónde comenzar a nadar si le dieras a elegir en mitad de los océanos un punto de partida.
Somos seres que nos agobiamos con la magnificencia. Necesitamos luces de navidad que nos guíen hasta el año nuevo. Por ello te vamos a resumir rápidamente en qué tienes que centrarte para aplicar el método Kaizen a las tareas de los agentes inmobiliarios:
- La autoevaluación es la parte clave. Todo el proceso del método Kaizen debe de ser consciente. Tenemos que racionalizar las acciones y encontrar los puntos de mejora.
- Proceso de reflexión y sacrificio. Mejorar no es fácil. Conlleva ir cada día un poco más allá y exigirnos de nosotros mismos.
- Los agentes inmobiliarios tienen mucho que aprender. Todavía más hoy en día cuando las tecnologías están abriendo muchos caminos. Es el momento idóneo para instaurar en su rutina el método Kaizen.
¿Estás preparado para impulsar tu carrera en el mundo inmobiliario con el método Kaizen y alcanzar la excelencia?